Ser autónomo en España no es fácil, y uno de los mayores dolores de cabeza llega a la hora de cumplir con Hacienda. Cada trimestre toca presentar impuestos y muchos cometen errores que pueden suponer sanciones o pérdidas de dinero. En este artículo te mostramos los fallos más frecuentes y cómo evitarlos con la ayuda de una gestoría online especializada. tu texto de cabecera
Los modelos trimestrales y anuales tienen fechas muy concretas. Un solo retraso puede implicar recargos automáticos por parte de Hacienda. Cómo evitarlo: utiliza recordatorios digitales o delega la presentación en una gestoría online que se encargue de enviar tus impuestos puntualmente.
Muchos autónomos se lían al calcular cuánto corresponde de IVA y cuánto de IRPF en sus facturas. Esto genera descuadres en la contabilidad. Cómo evitarlo: usar un programa de facturación que separe automáticamente ambos conceptos o contar con un asesor que revise tus facturas.
Hacienda puede requerir facturas hasta cuatro años después. No conservarlas puede ser un problema si toca una revisión.
Cómo evitarlo: digitaliza y sube tus facturas a una plataforma segura para tenerlas disponibles en todo momento.
Muchos autónomos pagan más impuestos de la cuenta porque no incluyen todos los gastos deducibles: internet, material de oficina, alquiler, gasolina (en algunos casos)...
Cómo evitarlo: lleva un control mensual de tus gastos y asesórate sobre qué se puede deducir y qué no.
Dejar todo para el último día aumenta las posibilidades de error.
Cómo evitarlo: dedica un rato cada semana a subir facturas y revisar movimientos. Con una gestoría online, este proceso se automatiza y no tendrás que preocuparte.